1 NAVAS
23 DANILO 3 PEPE 4 RAMOS 6 NACHO
19 MODRIC 16 KOVACIC 10 JAMES
17 VÁZQUEZ 9 BENZEMA 7 RONALDO
- 20 ASENSIO X 10
- 12 MARCELO X 4
- 22 ISCO X 9
A priori era un partido propicio para una goleada, como comenté con el simpático irlandés que se sentó junto a nosotros en el fondo sur. El Sporting de Gijón ocupa el decimoctavo lugar en la clasificación, y la diferencia de su plantilla con la del Madrid es abismal. Tanto es así que a ninguno nos pareció mal el XI que Zidane dispuso, con tanto meritorio. “Si no juegan hoy, no sé cuándo van a jugar éstos” pensé al ver a Danilo y compañía.
Además, el partido empezó con viento de cola. Un penalty ingenuo sobre Vázquez en el 4′ sirvió para que Ronaldo anotase el 1-0, y un magnífico centro de Nacho desde el lateral izquierdo supuso el 2-0, obra también del portugués, pichichi de la liga con 10 tantos. Poco después marcó el propio Nacho en fuera de juego, tras chilena de Ramos, pero el linier marcó la posición ilegal. Parecía que golearíamos sí, pero la lluvia no era un buen augurio. Espoleados por el agua, los gijoneses acortaron distancias. La jugada vino de un mal pase de Modric, a quien nadie ayudaba a sacar el balón jugado. Con 2-1 nos fuimos al descanso.
Cada vez llovía más. Esperábamos que un tercer gol del Madrid acabase con la emoción, y pudo llegar en un cabezazo franco de Benzema, pero el francés falló un gol clarísimo. La grada la tomó con el galo, desmemoriada ella, pues en Lisboa fue el francés quien marcó el gol de la victoria. Zidane movió el banquillo con la torpeza y lentitud acostumbrada, y el Sporting empezó a creerse que podía aguarnos la tarde (aún más, si cabe). Nacho cometió un absurdo penalty y el Bernabéu entró en pánico, pues quedaban 10 minutos y el empate parecía inminente. Pero el delantero croata del Sporting, tras tomarse las pulsaciones y comprobar que estaba preparado para ejecutar tan decisivo disparo, lo lanzó fuera.
No hubo más sustos, ni más fútbol. Sólo más agua. Acaso un caño majestuoso del recién salido Isco, que siempre se empeña en devolvernos el precio de la entrada.