
13 CASILLA
19 ACHRAFF 4 RAMOS 5 VARANE 12 MARCELO
14 CASEMIRO
10 MODRIC 8 KROOS
22 ISCO
7 RONALDO 9 BENZEMA
- 6 NACHO x 5
- 17 VÁZQUEZ x 19
- 20 ASENSIO x 12
Cuando el 16 de agosto el Real Madrid barrió del campo al FC Barcelona en la vuelta de la Supercopa nadie hubiese imaginado que, antes de llegar a noviembre, estaríamos a 8 puntos de los culés en la clasificación de la liga. Y más allá de ese preocupante dato, el partido de hoy ha sido sonrojante. En los anteriores pinchazos en liga, el mejor jugador del rival era su guardameta; hoy el portero del Girona apenas ha tenido que hacer alguna parada de mérito.
Visto desde la distancia, los jugadores parecen acomodados. El Madrid es un equipo con la barriga llena: actual campeón de liga, de Europa y del Mundo. La plantilla es peor que la del curso pasado – ya no están Pepe, James o Morata en el banquillo, jugadores de reconocido prestigio – y hay siete u ocho jugadores que saben que tienen garantizado el sitio en el XI. Es sintomático que haya sido Isco quien más pedía el balón hoy, quizá en único que nunca ha podido sentirse titular indiscutible. El partido que hoy hay jugado Kroos, Modric y Marcelo sería suficiente para que estuviesen en el banco en los próximos partidos. Ceballos y Theo seguro que tienen más hambre que estos tres. No es excusa el cansancio, pues prácticamente todos habían descansado entre semana. Es un tema de desidia, seguro que en Wembley todos juegan más concentrados.
Los dos goles con que los gerundenses dieron la vuelta al marcador fueron casi seguidos, al poco de volver del descanso. Y en los dos hubo despistes defensivos, sí; pero también disfrutaron de dos tiros a los palos así como de alguna otra ocasión para conseguir el tercero. Cuando ibamos perdiendo Zidane cambió el esquema y colocó a Asensio y Vázquez en las bandas. El mallorquín ya no es el deslumbrante jugador de hace un mes, y el gallego es inútil como condón de ganchillo. En otras tardes, con un par de arreones hubiésemos levantado el partido, porque nuestra otrora legendaria pegada ya no existe. El Madrid no tiene gol. Ronaldo no está en forma y es el único delantero fiable en cuanto a anotación. Nos cuesta horrores marcar – llevamos los mismos goles que el Betis, con un partido jugado más -, habiendo perdido incluso nuestra mejor arma del año pasado: el juego aéreo. Es asombroso que aún no hayamos marcado de cabeza este año. Y lo peor es que incluso empezamos a desconfiar de nosotros mismos. Un equipo que tiene a Casemiro, Ronaldo, Ramos y Varane no puede sacar los corners en corto. Otro detalle dramático
Estar tan lejos del lider antes llegar a los Santos no lo hacíamos desde el último año de Mourinho. El consuelo que queda es que aquel FC Barcelona era intratable, y este parece bastante más débil. Sigo pensando que tenemos los mejores jugadores de la liga. Ójala quisieran jugar siempre.