13 COURTOIS
17 LUCAS V 3 MILITAO 6 NACHO 23 MENDY
15 VALVERDE 10 MODRIC 14 CASEMIRO 8 KROOS 20 VINI JR.
9 BENZEMA
El fútbol moderno nos sustrae algunas características de aquel en el que nos enamoramos de niños. Los dorsales del 1 al 11, las tardes pegados al transistor porque todos los partidos eran simultáneos… Pronto llegará la cubierta retráctil del Bernabéu para dejarnos sin estos partidos de lluvia en los que los 22 jugadores nos parecen héroes. Siguen corriendo, siguen inentando jugar casi sin poder ver y con el agua calando hasta los huesos. La imagen de Leo Messi temblando sobre el césped del Di Stéfano fue icónica.
El Madríbarsa – yo no escribiré eso de «clásico», que no es sino otra concesión a la modernidad -fue un partidazo. El Madrid fue muy superior hasta el descanso y consiguió dos goles de ventaja que pudieron ser tres. Pero justo antes del 45′ el Barsa avisó con un remate de Messi al palo desde el corner y otro disparo a bocajarro del argentino que Courtois desbarató. Era un aviso. En el segundo tiempo el Barsa dominó y el Madrid no aprovechó las contras de las que dispuso, lo que le condenó a sufrir un acoso final. El acoso fue yermo, quizá porque Messi ya no es el que era. Cuando más sufríamos, me vinieron a la cabeza clásicos de 2007 y de 2017, cuando el argentino marcó caso al final goles que fueron puñales. Esta vez no lo consiguió
El tantas veces denostado Zidane propuso una sorpresa táctica que dejó groogy a los culés los primeros 45′. Salió Valverde de titular para colocarse pegado a la cal derecha, cubriendo muchas veces las subidas de Lucas V. El mayor peligro culé es la conexión Alba – Messi, que nace en el flanco derecho. Con ese movimiento ZZ anulaba ese arma, y además el primer gol nació desde ese costado, con Valverde rompiendo lineas con el balón en los pies, pase a Lucas que centra y Benzema, a quien se le sale la clase por las orejas, remata de tacón para marcar el primero. El gol del francés fue la demostración de que el tacón puede ser frívolo pero también es un recurso, quizá el único posible en esa acción. Golazo.
Si el Barsa sufría por la derecha, no lo hacía menos por la izquierda. En ese costado Vinicius explotaba su fenomenal velocidad, como hizo hace unos días ante el Liverpool, haciendo sufrir a los defensas azulgranas. Dest, Mingueza, … todos hicieron kilómetros detrás del brasileño. En una de esas galopadas fue objeto de falta en la frontal. El golpe franco lo ejecutó Kroos y¡, tras golpear en Dest y en Alba, encontró la red. Suerte, sí, pero también consecuencia de la mala decisión del defensa de darse la vuelta cuando llega el tiro. 2-0 y dominio absoluto. El partido pudo acabar poco después, en otra contra en la que Vini pasa a Valverde y este dispara cruzado al poste. El rechace le cayó a Lucas, que marró un remate facilillo. Si allega a entrar el tercero igual ni hay segundo tiempo. Ese remate fue la última acción de Lucas, lesionado poco después tras un choque con Busquets. La salida de Odriozola preocupó a todo el madridismo.
Tras el descanso, Koeman corrigió su alineación inicial y sacó a Griezzman para tener más mordiente. El Barça tendía que buscar el gol, mientras que el Madrid estaba cómodo agazapado y esperando la contra. Pero marcó el Barça en un remate patético de Mingueza (con la tibia), para demostrar otra vez que el 2-0 es el resultado más engañoso posible. El 2-1 animó al Barça y preocupó a Zidane, que no fue ajeno al desplome físico del equipo. Seguíamos teniendo contras, sí (una de Vinicius casi acaba con autogol de Araujo) pero en el 70′ llegaron los cambios, nada sorprendentes si piensas en que el miércoles andaremos trotando por Anfield Road. El equipo quedó así:
13 COURTOIS
19 ODRIOZOLA 3 MILITAO 6 NACHO 23 MENDY 12 MARCELO
10 MODRIC 14 CASEMIRO 22 ISCO
11 ASENSIO 24 MARIANO
Es increíble jugarse la liga con estos muchachos. Zidane lo hizo, insisto, creo que pensando en el miércoles
Pese a que el empuje físico vino bien y el Madrid adelantó líneas, el Barça achuchaba. Marcelo pudo sentenciar pero perdió una carrera con Mingueza y el partido acabó con un chutazo al larguero del joven Illax que nos hizo contener la respiración. Poco después, el silbido del árbitro nos liberó y los héroes blancos alzaron los brazos. A la espera de lo que hoy haga el Atleti, el Madrid quedaba en lo más alto de la clasificación. Y lo hacía ganando al Barça los dos partidos de liga, cosa que no ocurría desde la temporada 07-08, la de la liga de Schuster.